jueves, 3 de noviembre de 2011

Locke, Rousseau, Pestalozzi y Fröebel

Martha Jackeline Márquez de Santiago
Licenciada en Letras
Seminario de Historia de la Pedagogía
Maestría en Ciencias de la Educación
Docente: Manuel Sánchez Guerrero
2 de noviembre de 2011.
LA FILOSOFÍA Y LA PEDAGOGÍA DE JOHN LOCKE
La influencia de John Locke en la pedagogía fue de gran importancia por ser un personaje que cuestionó las concepciones dadas a la capacidad intelectual del ser, al referirse negativamente al innatismo de las ideas y afirmar con argumentos válidos que las ideas no nacen con el ser, sino se desarrollan en éste a partir de las influencias externas. Porqué causa admiración las exposiciones de Locke, es por el hecho de que sus hipótesis planteadas resultan cuestionables al pensar que los humanos nacemos con la capacidad de crear ideas, pero lo que él dice es que no se nace con ellas y es ahí donde estriba el problema, pues cómo se puede comprobar que un bebé, un recién nacido no formula ideas o cómo comprobar que sí lo hace.
Las afirmaciones de Locke quizá sean justificables pero en realidad no se puede demostrar si son verdad o mentira, sólo es un supuesto que él hace, para ello expongo las explicaciones a  las que alude el pedagogo sobre el tema; él dice que la idea es el objeto del conocimiento y que para que ésta se formule es necesario acceder a la experiencia, es decir, los seres estamos expuestos a los sucesos exteriores e interiores del cuerpo que se representan a través de los órganos físicos o también mediante los sentimientos (frío, calor, dolor, alegría, etc.) de esta manera nace una concepción mental que es la idea y puede ser de dos tipos que son la de sensación y la de reflexión. (Abbagnano y Visalberghi, 2009, p. 335).
La idea de  sensación es la que proviene del exterior como los colores, las temperaturas, etc., y la de reflexión es interna como la percepción, el pensamiento, la duda, el raciocinio, el conocimiento, la voluntad y todas las ideas que se refieren a operaciones de la mente “Locke se mantiene fiel al principio cartesiano de que tener una idea significa percibirla, es decir, ser consciente de ella. […] las ideas innatas no existen porque no son pensadas; una idea no es si no es pensada” (Abbagnano y Visalberghi, 2009, p. 335). Así demuestra que las ideas existen en el hombre pero que son a raíz de las circunstancias, de las sensaciones de la experiencia pero también dice que hay ideas complejas y se dividen en tres tipos.
Estas ideas complejas son de modos, sustancias y relaciones las primeras son las no consideradas subsistentes por sí mismas, sino sólo como manifestaciones de una sustancia (triángulo, gratitud, asesinato), las segundas son las que se consideran subsistentes por sí mismas como el hombre, objetos, animales, etc., y la última es la confrontación que se hace de una idea con otra (Abbagnano y Visalberghi, 2009, p. 337). De todo esto se deduce que lo que Locke quiere decir es que las ideas se forman en la mente a partir de las sensaciones externas o internas de ello se parte para ir cuestionando y confrontando para formar nuevas ideas, más complejas.
Pero todo ello lo hace con el objetivo de comprobar que la humanidad no es perfecta, en el sentido de que no hay ideas puras y verdaderas, que se pueden crear, las cuales serán buenas o malas y se pueden acercar a la verdad pero no se podrá comprobar en todo caso, lo que quiero decir es que él afirma que el hombre tiene límites, limites intelectuales, esto lo hace con el fin de partir de una concepción de la capacidad cognitiva para formar las estrategias pedagógicas.
Entonces plantea la validez del conocimiento y que se comprueba a través de un contraste de acuerdo o desacuerdo de las ideas ya sea intuitivo o demostrativo; el primero es más fácil de percibir y valorar, puesto que versa sobre cosas que se pueden probar mediante la observación inmediata como el decir que el blanco es blanco porque se evidencia que no es otro color y esto no es difícil de alcanzar. Pero la demostración de un conocimiento es cuando hay un desacuerdo entre dos ideas y no se percibe inmediatamente cuál es la correcta y hay que ponerlo en evidencia mediante otras ideas a manera de pruebas, no obstante, este tipo de conocimiento es mayor que el intuitivo aunque no se pueda demostrar su validez. (Abbagnano y Visalberghi, 2009, p. 339).
Para Locke el verdadero conocimiento estaba mediante la conformidad de las ideas con la realidad de las cosas, aspecto que no se puede garantizar pues no todo se puede probar con la realidad.

Referencias consultadas
Abbagnano, N. y A. Visalberghi. (2009). Historia de la pedagogía. México. Fondo de Cultura Económica. La filosofía y la pedagogía de John Locke (333-346).

ROUSSEAU, PESTALOZZI Y FRÖEBEL
La vida y obra de estos tres pensadores y pedagogos está muy relacionada en diferentes aspectos, por su carácter de contribuir a la educación a la manera de formar personas mediante la enseñanza, por sus diversas coincidencias en cómo se debe enseñar, aunque también existen percepciones contradictorias entre unos y otros y también por la forma de vida que tuvieron los tres que quizá no sea tomada muy en cuenta para lo que fue su obra pero que si se observa pudiera ser que influyó en el tipo de vida que tuvieron y que los llevó a ser de tal forma y ello es la situación de la muerte de sus madres en dos de ellos y la del padre en uno de los tres a temprana edad, situación que pudo haber influido en que ellos propusieran formas de enseñanza determinadas como la importancia de la educación por parte de la familia.
Más que referir detalladamente la vida, obra y pedagogía de cada autor se tratará de hacer un contraste entre sus posturas y su influencia en la pedagogía de aquel entonces y la de ahora dando importancia a los puntos en acuerdo y en desacuerdo entre los tres. Se realizará por orden de aparición histórica.
Comenzando por Rousseau se considera que él apelaba a una educación basada en la libertad y la naturaleza, pretendía que al niño se le dejara crecer a su libre albedrio para que se desarrollara de manera natural, puesto que para él esto era lo ideal para no formar seres infelices que se les amolde al modo que otros consideren correcto. Para Rousseau la educación debe consistir en el proceso de crecimiento natural del individuo de tal manera que no sea un salvaje pero tampoco un ser dependiente y servil de y para los demás.
Para él lo principal es la democracia en la que se forma personas que son para la sociedad y para sí, que cada uno sea como su naturaleza misma lo guíe pero que a la vez no pierda el sentido del contrato social, que adquiera consciencia de que vive en una sociedad la cual le merece respeto y le brinda respeto. La propuesta de éste es que se le ofrezca al individuo desde sus primeros años de vida, desde la lactancia más bien, oportunidades de aprender mediante las experiencias importantes, considero que a esto se refiere a situaciones que le permitan observar, cuestionar y formular un conocimiento, a lo cual el educador deberá enfrentarlo predeterminadamente.
El pedagogo está en contra de los métodos verbalistas que llenan de conceptos a los educandos sin permitirles la formación de cuestionamientos y de aprendizajes y  está en desacuerdo con Locke “…en polémica con Locke, declara la guerra a los hábitos. No hay sino uno que el niño debe contraer: el de no tener ninguno” (Abbagnano y Visalberghi, 2009, p. 396). Lo que Rousseau propone para los primeros años es que no se le quiera forzar a aprender, no importa que se pierda el tiempo, ya a los doce o quince años la atención del joven está más guiada al sentido de la utilidad y por lo tanto será más consciente de su proceso de aprendizaje.
Pestalozzi fue en educador que pasó por varias etapas de formación y de práctica para obtener mejores resultados en su pedagogía, pues en un principió fracasó en su empresa de formar personas mediante la práctica agraria con la finalidad de cultivar la enseñanza a través de la experiencia en el trabajo de campo pero no lo logró por el factor económico, pues no supo administrar su hacienda  y esto lo llevó a la ruina. Sin embargo, estuvo en constante preparación y emprendimiento de nuevas empresas educativas con la formación de institutos en uno y otro país con la ayuda de diversos colaboradores.
La contribución de este personaje al campo educativo al igual que Rousseau consiste en la importancia que le atribuyen a la formación natural del individuo pero el primero le da gran jerarquía al juego, proponiendo una formación en libertad mediante al aprendizaje lúdico para que a través de la alegría del niño se forme el conocimiento y afirma que “El problema consiste en “reunir lo que Rousseau ha separado”, es decir, la libertad de la naturaleza con la autoridad del deber, pues “ni aun en las circunstancias más favorables es lícito abandonar el niño a merced de su capricho”” (Abbagnano y Visalberghi, 2009, p. 469). Para Pestalozzi la formación natural y lúdica era importante, siempre y cuando no se diera paso al libertinaje.
Para él la educación debía estar regida por lo ético-religioso, punto en el que coincide con los otros dos pedagogos, el amor a Dios, la religión como parte medular en la formación del ser. Y ésta sería inculcada por los padres como primeros formadores y principales, puesto que de ellos se deriva el amor por Dios y la fe en Dios, si éstos no la tienen no la transmitirán.
Fröbel que fue a conocer los institutos de Pestalozzi y quedó admirado por la forma de enseñanza e intentó seguir sus métodos, también hace énfasis en la importancia de la educación inicial, que es formada por los padres y contribuye de manera más sustanciosa al proponer y poner en práctica métodos que enseñarán a los padres a educar a sus hijos. Coincide con el anterior en la enseñanza a base del juego, de ahí nacen los preescolares en los que se deberá formar al niño en sus primeros años mediante la diversión.
Los tres autores tienen en común la necesidad de formar seres libres pero comprometidos con la sociedad, respetándola y en la formación en la fe y la religión hacen especial mención de que es parte medular para la formación del niño con sentido de amor, respeto, creencias y virtudes. El juego es otro punto de concomitancia  entre los tres pero a todo ello cada uno le da su sentido y la forma en que argumentan la importancia quizá sea divergente, no obstante, el objetivo puede llegar a ser similar.

Referencias consultadas
Abbagnano, N. y A. Visalberghi. (2009). Historia de la pedagogía. México. Fondo de Cultura Económica. Rousseau (387-400), Pestalozzi (466-477) y Fröebel (478-487).

2 comentarios:

  1. Para Pestalozzi, ninguna educación es posible si no se educan los sentimientos y aptitudes, une lo que Rousseau separa: la libertad de la naturaleza con la con la autoridad del deber. Pestalozzi coincide con Rousseau, pues aboga por una enseñanza de acción menos verbalista, dando importancia a la educación afectiva, así como a la claridad cognoscitiva, “intuición” y los elementos de la ésta, son: forma, número y nombre. La experiencia de primera mano viene a ser la única forma del conocimiento por lo que al dar importancia a la experiencia, intuición, aptitudes, sentimientos y estado social, Pestalozzi une pedagogía con la naturaleza, identificando el común origen de todos los medios de enseñanza.

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  2. Lo que me gusto de esta lectura es que Locke abogaba por un liberalismo, que el individuo tuviera la libertad de elegir estudiar y prepararse para la vida, es por eso que coincido contigo que los autores tenían en común la necesidad de formar seres libres comprometidos con la sociedad. Buena Publicación Jacke :)

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